Hace un año nacía el dispositivo de contención que forma parte del Hogar de Cristo, en el barrio La Cuchilla. “Hay papás que nos dicen que nunca habían jugado con sus hijos”, contó la coordinadora del lugar al que asisten entre 15 y 25 menores cada día.
“Jesús Niño es un espacio que le da lugar a chicos que están pasando por situaciones graves, difíciles, duras. Los contiene, los abraza, los estimula, los mira, los protege. Eso es lo que hacemos. Y, sobre todo, ponemos en foco el trabajar la revinculación, porque el consumo problemático de sustancias hace que haya una desvinculación importante”, contó Dolores Pons, psicopedagoga y coordinadora del espacio que trabaja con otras cuatro mujeres.
“La modalidad de todo el Hogar de Cristo tiene que ver con el acompañamiento de la unidad familiar. En este sentido, también Jesús Niño tiene la impronta de acompañar la vida, por eso vamos a los cumpleaños, a los bautismos o a velorios”, explicó sobre el dispositivo que nació hace un años.
“Cuando el Hogar de Cristo abrió sus puertas los varones y las mujeres estaban todos juntos. Con el tiempo, se abrió la casa Corazón de María para las mujeres. Y, tantos con unos como con otros, siempre vinieron los hijos. Desde ese momento empezamos a pensar un espacio para los chicos. El espacio responde a varias necesidades. Los niños necesitan una mirada particular, una contención especial, porque también las madres y los padres necesitan poder tener su espacio, como cualquier padre”, ahondó Pons.
El programa, que cuenta con el respaldo de la Senaf, el Copnaf, Cáritas y las donaciones particulares, contempla a 80 niños, quienes si bien no concurren a diario, tienen las puertas abiertas. “Todos los días –de lunes a viernes, de 14 a 17– tenemos entre 15 y 25 chicos, depende del proceso porque el que estén pasando sus padres”.
“Hace muchos meses, todos los miércoles en Jesús Niño venimos dando un taller que convoca a los padres y se llama Conectando con nuestros hijos. En el que trabajamos la vinculación, la comunicación y las emociones”, remarcó la psicopedagoga.
Muchas veces la dinámica de las actividades dividen a los menores, por un lado, y a los padres y madres, por otro. En otras oportunidades el trabajo vincula en un mismo espacio a todos. “A través del juego nos enfocamos en la revinculación”, contó.
“Hay papás que nos dicen que nunca habían jugado con sus hijos, o que les cuesta mucho, por eso la importancia de estimular esto. La violencia existe, como existe en muchísimas familias, por eso es fundamental educar en el amor. Acá venimos todos los días a jugar, a divertirnos, a cantar, bailar y abrazarnos. Eso es lo que se les enseña a los chicos”, indicó la responsable.
Por otro lado, respecto a los avances en la salud y la reinserción de los adultos en conumo problemático de sustancias, Pons remarcó: “Cuando toda la familia del Hogar de Cristo está presente, más allá de las recaídas y de los momentos malos. Cuando se está acompañando otros momentos, como puede ser un cumpleaños o cualquier evento, es cuando esos padres empiezan a sentirse parte y empiezan a cambiar un montón de aspectos de sus vidas”.
“Una mamá recuperó a sus cinco hijos y hoy está desde un lugar protagónico en la vida de cada uno de ellos. También tenemos el caso de un papá que tiene mellizos, los perdió y los nenes pasaron por un montón de hogares. Hoy volvió a vivir con sus hijos y es referente del Hogar de Cristo Asunción de María”, ejemplificó.
“Cuando no se está adentro parecería que acompañar de esta manera es utópico. Pero desde acá nos damos cuenta que es real, que esta es la forma y que así es como se ven resultados. Obviamente, tenemos muchas situaciones complicadas, idas y vueltas, pero tenemos avances y recuperaciones. Eso es muy gratificante”, concluyó la coordinadora del espacio.
¡Doná tu tiempo y colaborá!
Este verano Jesús Niños abre sus puerta. En este marco, se lanzó la campaña de puertas abiertas e invita a “donar lo mejor de vos y sumarte a un verano diferente”, regalando una hora y media de tu verano haciendo lo que más te gusta hacer en los talleres que se abrirán.
Equipo
Además de la coordinadora Dolores Pons, en Jesús Niños trabaja Sheli Godoy (administración), Ivana Molina (acompañante de sala), Sabrina Traba (acompañante terapéutico) y Ernestina Pascual (estudiante de Psicologia).
Para ver Nota original: https://www.eldiaonline.com/jesus-nino-un-espacio-los-hijos-depadres-y-madres-consumo-problematico-n1006460